Se abandonan muchísimos gatos de casa. Es el caso de Jasmín. Una gata cruce de siamés, cariñosisima, delicada y muy sociable que quedó preñada en la calle después de ser abandonada, por eso sus hijos nacieron en la calle. Concretamente en el patio de un colegio. Es el motivo único por el que las protectoras nos vemos desbordadas ahora en estos meses con las camadas de gatitos como la de las hijas de Jasmin. Se regalan gatitos por doquier, no se les identifica y en pocos meses acaban en la calle. Y se reproducen. Recordamos que son seres vivos, mamíferos, sensibles, en unos casos independientes, en otros totalmente dependientes de los cuidados higiénico sanitarios que podemos y debemos procurarles los humanos, porque conviven con nosotros. Adopta a Jasmin, adopta a sus gatitas. Se entregan con su test de inmunodeficiencia y leucemia. Y hacemos un seguimiento para su identificación con chip.